[NOTICIA] El botellón impidió a las ambulancias acceder al Balcón del Guadalquivir

ABC. CÓRDOBA, 28/05/2010


La marabunta de jóvenes que el pasado miércoles se concentró a las puertas de El Arenal convirtió al Balcón del Guadalquivir en un espacio infranqueable para los servicios sanitarios y los vehículos policiales. Según denunciaron ayer fuentes del sindicato CSI-CSIF en el Ayuntamiento de Córdoba, la situación fue «caótica». En este sentido, apuntaron que «durante el botellón se produjeron tres reyertas importantes y la Policía Nacional tuvo graves problemas para entrar. Menos mal que los ánimos se aplacaron sin que fuera necesaria la intervención de los efectivos».

Además, en torno a las 20.30 horas, «los agentes locales recibieron una llamada alertando de que un joven que estaba en el lugar de la concentración, en la zona náutica de acceso para piragüismo, había sufrido un coma etílico. A los servicios sanitarios les fue imposible acercarse con el vehículo para atender al afectado, lo que provocó que entre la multitud enarbolaran al perjudicado y lo trasladaran en volandas hasta que los técnicos sanitarios pudieran encamillarlo y trasladarlo al furgón médico, que estaba a unos 60 metros del Molino de Martos».

Además, según el sindicato, en el interior del recinto ferial no existieron patrullas de la Policía Local dedicadas a atender las posibles incidencias en materia de seguridad colectiva, «puesto que todas ellas estaban dedicadas al dispositivo de canalización del botellón».

Para más agravio, denunció CSI-CSIF, «la seguridad en el resto de la ciudad quedó absolutamente mermada, puesto que no había patrullas para atender la infinidad de llamadas de demanda del 092».

A tal extremo llegó la situación que hasta el personal dedicado a la Oficina de Inspección de Guardia, Diligencias Judiciales, Atención a la Mujer y el Menor, e Investigación de Accidentes de Tráfico tuvo que desplazarse para atender la necesidad de organización del tráfico rodado a la zona de la plaza de toros, «ausentándose gran parte de la jornada laboral de su puesto ordinario, y dejando al margen sus cometidos específicos».

El edil del PP Rafael Jaén se sumó a la retahíla de críticas, reprobando al equipo de gobierno que promueva una «Feria del botellón». «El PP quiere a los jóvenes dentro del recinto. He consultado a muchos colectivos que montan casetas y me han dicho que estarían dispuestos a bajar los precios algunos días para los jóvenes».

Bajo control

Por su parte, el concejal delegado de Seguridad y Tráfico, José Joaquín Cuadra, defendió que «el botellón está erradicado de la Feria», puesto que, como quedó comprobado el miércoles, se circunscribió al Balcón del Guadalquivir, fuera del recinto.

Además, elogió el comportamiento de los jóvenes y señaló que, aparte de algún que otro coma etílico y una detención por una riña, «no hubo que lamentar incidentes de importancia».

Finalmente, dijo al PP que el Ayuntamiento «no excluye a este colectivo, sino que le habilita un espacio para que no tengan problemas».